La Storia del Contadino Saggio C’era una volta un povero contadino, molto saggio, che lavorava duramente la terra insieme a suo figlio. Un giorno, il ragazzo corse dal padre dicendo: "Padre, che disgrazia! Il nostro cavallo è scappato!" Ma il padre, con calma, rispose: "Perché lo chiami disgrazia? Aspettiamo e vediamo cosa porterà il tempo." Pochi giorni dopo, il cavallo tornò, e con sé portò un altro cavallo. "Padre, che fortuna! Ora abbiamo due cavalli!" – esclamò felice il ragazzo. Ma il padre, con la stessa saggezza, rispose: "Perché lo chiami fortuna? Aspettiamo e vediamo cosa porterà il tempo." Dopo qualche giorno, il ragazzo decise di montare il nuovo cavallo, ma l’animale, non abituato al cavaliere, si imbizzarrì e lo scaraventò a terra. Il giovane si ruppe una gamba. "Padre, che disgrazia! Mi sono rotto una gamba!" – si lamentò il ragazzo. Ma il padre, sereno, replicò: "Perché lo chiami disgrazia? Aspettiamo e vediamo c...

"RECUERDA todos vamos avanzando en edad, pero nuestras destrazas no desaparecen ...transmutan ..cambian... y a veces se multiplican . ..sigue tu camino... veras como siempre hay Luz " kmrt . El cuento es viejo como la vasija, y alguna vez apareció aquí... pero nunca está de más repetirlo. LA VASIJA VIEJA.... Cuenta la leyenda india que un hombre transportaba agua todos los días a su aldea usando dos grandes vasijas, sujetas en las extremidades de un pedazo de madera que colocaba atravesado sobre sus espaldas. Una de las vasijas era más vieja que la otra, y tenía pequeñas rajaduras; cada vez que el hombre recorría el camino hasta su casa, la mitad del agua se perdía. Durante dos años el hombre hizo el mismo trayecto. La vasija más joven estaba siempre muy orgullosa de su desempeño, y tenía la seguridad de que estaba a la altura de la misión para la cual había sido creada, mientras que la otra se moría de vergüenza por cumplir apenas la mitad de su tarea, aún sabiendo que ...

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